Lo mejor para evitar las ampollas es la prevención y puede comenzar eligiendo las zapatillas adecuadas. Cuando corres tu pie golpea el suelo de una manera casi idéntica en cada paso, haciendo que roce contra tus zapatillas o calcetines, repetidamente y en los mismos lugares. Un calzado mal ajustado, apretado, o demasiado grande, aumentará el roce causando las ampollas.
Las zapatillas para correr están diseñadas para evitar ampollas y lesiones por el movimiento repetitivo, al ofrecer una amortiguación específica para ayudar en la absorción de impactos.
Características de unas zapatillas para correr
La zapatilla ideal para correr debe adaptarse al tipo de carrera que hagas y la forma de tu pie. Cuando compres zapatillas, cuéntale al vendedor tu rutina de ejercicios: cuánto tiempo has estado corriendo, en qué tipo de entorno lo haces, así como cualquier problema de pies que tengas.
Algunas zapatillas para correr están diseñadas para pavimento, ya que son ligeras, flexibles y amortiguan los pies durante pisadas repetitivas en superficies duras y uniformes. Otras están diseñadas para rutas con rocas, barro u otros obstáculos, ofreciendo más estabilidad en el tobillo y soporte para superficies irregulares.
Una vez que hayas establecido el tipo de zapatilla que necesitarás, es hora de la adaptación. Los pies tienden a hincharse un poco al final del día, de forma similar a cuando corres, por lo que te recomendamos que te pruebes los zapatos al final del día para lograr un ajuste más preciso.

Asegúrate de tener suficiente espacio para el dedo del pie. Debe haber aproximadamente un ancho de pulgar entre el extremo del pie y el extremo de la zapatilla. Tu pie debe estar centrado en la plataforma de la zapatilla, envolviéndose cómodamente alrededor, sin apretarlo, ni dejándolo suelto.
¡Pruébatelas! Corre en una cinta o da unas vueltas alrededor de la tienda para asegurarte de que no haya irritaciones ni resbalones en el talón. También pregunta en la tienda por unos buenos calcetines para correr, suponen una gran diferencia.
¿Debo correr con ampollas?
Si notas la aparición de una ampolla, detente y cambia de calzado inmediatamente. Si esto no es posible, busca un apósito para ampollas COMPEED® en tu bolsa de deporte. De esa manera, tu carrera o juego no se interrumpirá y no decepcionarás a tu equipo ni a ti mismo. Una última regla para prevenir las ampollas: los pies sudorosos también crean fricciones que producen las ampollas, por lo que es importante mantener los pies secos. Para ello, te recomendamos que uses talco para pies y cambies tus calcetines regularmente.